¿Sabías que existen farolas con WiFi para tener ciudades mejor conectadas?

La presencia que el componente tecnológico ha alcanzado en nuestras vidas resulta difícil de medir. La mayoría de nosotros comienza el día mirando una pantalla y, lo más probable, es que lo termine de la misma manera. En definitiva, vivimos rodeados de aparatos electrónicos, gadgets y un montón de avances tecnológicos que, en teoría, han venido a facilitarnos la vida y a hacer que muchas tareas rutinarias se puedan automatizar o, al menos, se puedan realizar de manera más cómoda.

Aunque lo más curioso de todo esto es que muchas de estas innovaciones tecnológicas han llegado de una manera tan discreta que desconocemos su existencia. Por ejemplo, ¿sabes que existen farolas con conectividad WiFi? ¿Has oído hablar de ellas en alguna ocasión? Porque si no es así te recomendamos seguir leyendo este post de nuestra Sección Tecnología en el que te contamos algunos aspectos.

Farolas con WiFi, poco más que decir.

Pues como seguro imaginas, no hay mucho que explicar en cuanto a qué son estas farolas. Se trata, efectivamente, de farolas que además de iluminar las calles, plazas o avenidas públicas, también proporcionan Internet a los transeúntes.

La compañía canadiense Hybridyne Power Systems fue la pionera en desarrollar hace unos años unas farolas que funcionaban solo con energías renovables, concretamente utilizaban una especie de panel solar que colocado en su zona superior permitía que la luz emitida proviniera exclusivamente de las radiaciones solares. De hecho, la dinámica no podía ser más sencilla: la luz que recoge el minipanel solar durante el día, lo utilizan las farolas para iluminar los espacios públicos por las noches. 

A la sostenibilidad que aporta esta modalidad de farolas, había que unir el hecho de que, al no necesitar energía eléctrica, podían ser instaladas en cualquier lugar sin apenas necesitar obra, ni cableado ni gastos de mantenimiento eléctrico.

¿Por qué te contamos esto? Porque farolas tan sostenibles creadas por la empresa canadiense también incorporaban otra importante innovación: eran puntos de acceso WiFi, que permitían crear una red inalámbrica autosuficiente para proporcionar Internet a los ciudadanos que se encuentran cerca de ellas. Una manera muy sencilla y efectiva de conseguir que Internet salga a la calle y ofrezca una cobertura popular. En definitiva, un paso más en las llamadas smart cities hiperconectadas.

¿Hay en España este tipo de farolas?

Este tipo de farolas llegaron a nuestro país de la mano de Ericsson y Philips que desarrollaron juntas el llamado Proyecto Zero Site mediante el cual se creaba la primera farola que integraba conectividad 2G, 3G y 4G, además de WiFi. La primera de ellas fue instalada en Santander. Poco después, en 2019, el mobiliario urbano crecía en esta línea con otro proyecto similar, el Proyecto Wi-Fiber con farolas modulares que incluyen un polémico sistema de vigilancia, además de conexión WiFi.

Estos avances tecnológicos, además de mejorar la conectividad de los ciudadanos, contribuyen a mantener un entorno más limpio y sostenible y, como decíamos, constituyen un paso más hacia las llamadas ciudades inteligentes en las que la conectividad es uno de sus rasgos distintivos, al igual que también lo es en la domótica de las casas inteligentes.

¿Sabías que existían este tipo de farolas? ¿Tienes conocimiento de si están instaladas en tu ciudad? ¿No te parecen una gran idea? De hecho, son muy útiles para que todas las personas, especialmente aquellas que no pueden acceder a una conexión a Internet, puedan estar conectadas mientras caminan tranquilamente por sus calles. Sin duda, una tecnología con aplicaciones como estas son las que realmente hacen el mundo mejor. Para nosotros, las farolas con WiFi son un rotundo sí.